Entre viñedos, navazos y mar andan estas tres historias que pertenecen a la cosecha del 75. Tres emprendedores de Sanlúcar que se marcharon de su tierra para formarse y adquirir experiencia, y que con el tiempo regresaron para hacerse un nombre en sus respectivos sectores. Lo curioso es que la vida de estos tres sanluqueños, es paralela y similar.
Armando Guerra
Armando Guerra se ha convertido en los últimos años en un referente en lo que a los vinos de Jerez se refiere, y un reputado conocedor de otros vinos españoles y extranjeros. Licenciado en Derecho y Master en Viticultura y enología, su vida ha transcurrido entre botas de vino. Su padre, Manolo Guerra, sigue regentando la “Taberna der Guerrita”, uno de los templos del vino del marco de Jerez que hay en España. Armando sabe exprimir la esencia de los caldos que se hacen en Sanlúcar y comunicar de manera clara las virtudes de nuestros vinos. Por cierto, cuando visites la Taberna “Der Guerrita” no dejes de probar la” manzanilla CEDE”, el “amontillado” o el “Palo cortao”, criados como si de un hijo se tratase por Manolo Guerra.
Actualmente, Armando Guerra es el Director de Alta enología de Bodegas Barbadillo, y el creador del “Club Contubernio”.
Rafa Monge
Rafa Monge es otro sanluqueño que también se fue muy joven de su tierra para crecer como persona y formarse. Tras vivir en Inglaterra, Barcelona y Madrid, y formar parte de varias multinacionales, volvió a Sanlúcar para trabajar la tierra de su familia y “diseñar” verduras y hortalizas que siempre tuvo en mente con “Cultivo Desterrado” .Tras tres años de duro trabajo, Rafa Monge se ha convertido en un referente en cuanto a productos novedosos de la huerta, y parte imprescindible de la alta cocina de muchos restaurantes punteros de España. Su manera de cultivar el “navazo”, regar la tierra con agua de tollo y la creatividad a la hora de plantar, escoger los productos que quiere sembrar y su particular forma de comunicar, hacen de Cultivo Desterrado un referente en todo lo concerniente al mercado “gourmet”.
Fran Senra
Fran Senra, al igual que sus amigos Armando y Rafa, salió de su zona de confort a los 18 años, para volver a sus raíces con 41. La necesidad de quedarse a vivir en Sanlúcar, hizo que se plantease crear su empresa. De esta forma nace Conservas Senra, empresa pionera en sacar al mercado guisos marineros de Sanlúcar en conserva. En poco menos de tres años, Fran Senra y su equipo, han logrado que el “Choco al pan frito”, “Langostinos con tomate”, “Garbanzos con langostinos” o “Langostinos al ajillo y manzanilla”, entre otros guisos, formen parte de la despensa de muchos españoles
Es cierto que la riqueza que atesora Sanlúcar permite que la ciudad se “venda” sola, pero emprendedores como estos tres amigos que están llevando lejos el nombre de su tierra, garantiza que cada vez más personas vengan a visitarnos y a conocer nuestra riqueza.